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Basílica de Santa Eulalia en Mérida

La Basílica de Santa Eulalia es uno de los monumentos más significativos de Mérida, una ciudad rica en historia y patrimonio cultural. Este edificio no es solo una obra maestra arquitectónica, sino también un testimonio viviente de la devoción cristiana y la complejidad histórica de la región.

Historia y Devoción a Santa Eulalia

Ubicada en la Avenida de Extremadura, la Basílica de Santa Eulalia se erige como un homenaje a la mártir del mismo nombre, una joven emeritense perseguida y martirizada durante las purgas del emperador Diocleciano en los primeros años del siglo IV d.C.

La historia de Santa Eulalia ha sido objeto de numerosas obras literarias y documentales desde la antigüedad, incluidos textos de poetas como Prudencio y obispos como Hidacio.

La devoción hacia ella ha sido una constante en la historia de Mérida, evidenciada en numerosos textos y hallazgos arqueológicos.

Evolución Arquitectónica

Antecedentes Romanos y Visigodos

Antes de ser un sitio religioso, el área donde se encuentra la basílica era una extensión de mansiones suburbanas durante el período romano.

Con el tiempo, el lugar se convirtió en una necrópolis cristiana, especialmente después del martirio de Santa Eulalia.

La estructura original fue una basílica paleocristiana construida probablemente en el siglo IV, durante un período de relativa paz para los cristianos tras la conversión del emperador Constantino.

Esta primera edificación sufrió diversas transformaciones y fue parcialmente destruida, especialmente durante la ocupación árabe en el siglo IX.

Reconstrucción y Estilo

El edificio actual data de la Reconquista, aproximadamente en el año 1230. Es una amalgama de estilos, reflejando las diversas etapas de la historia arquitectónica de la península ibérica.

Mientras que la planta de la iglesia sigue siendo básicamente la misma que en la época visigoda, su estilo se podría describir como románico con influencias góticas.

Además, elementos arquitectónicos del Barroco y del Renacimiento también se pueden encontrar en la estructura, como es el caso del camarín añadido en el siglo XVIII y una portada del siglo XVI.

La Cripta y «El Hornito»

Uno de los descubrimientos más interesantes se hizo durante las excavaciones entre 1990 y 1992. Debajo de la basílica, se halló una cripta que contiene un verdadero mosaico de sepulcros de diferentes épocas, desde tardorromanos hasta visigodos y modernos.

Justo al lado de la basílica se encuentra «El Hornito», un pequeño oratorio que marca el lugar del martirio de Santa Eulalia. Este humilde pero poderoso monumento es un recordatorio perpetuo del sacrificio de la santa y sigue siendo un lugar de devoción para los emeritenses.

Camino de la Mártir

Cada 9 de diciembre, los habitantes de Mérida realizan el Camino de la Mártir, un peregrinaje que sigue la ruta que Santa Eulalia tomó desde Arroyo de San Serván hasta Mérida antes de su martirio.

Visitando la Basílica

La Basílica de Santa Eulalia es accesible al público, con un precio de entrada para la cripta de 6 euros y tarifas reducidas disponibles. También forma parte del Conjunto Arqueológico de Mérida, declarado Patrimonio de la Humanidad en 1993, lo que permite acceder a varios monumentos de la ciudad con un ticket combinado.

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